Pedir un préstamo nunca es una decisión fácil. Antes de hacerlo, hay aspectos importantes que se deben conocer. Hemos recopilado algunas preguntas frecuentes para proporcionarte más información sobre préstamos, préstamos online y la comparación de préstamos.
Comparar préstamos de distintas entidades, gracias al comparador de Finbino, es más fácil que nunca.
Finbino es un comparador independiente y gratuito que te ayuda a comparar opciones para pedir dinero prestado y tomar la mejor decisión posible. Aquí tienes las ofertas más ventajosas, en un único lugar, en un listado que incluye bancos y entidades no bancarias, clasificados por cantidad de dinero, plazo de devolución y tasa de interés. Puedes filtrar de acuerdo a tus preferencias y luego seleccionar tu préstamo de entre los resultados.
Finbino te permite comparar préstamos de forma rápida y sin registrarte, de entre los productos más actualizados del mercado y las últimas ofertas, de forma 100%online y sin moverte de casa.
¡No! Finbino es un comparador independiente gratuito para ti. No debes preocuparte por cargos ocultos ni gastos adicionales ni por comparar el préstamo ni por solicitarlo a una entidad que hayas encontrado a través de esta página web. En Finbino no hay costes ni los habrá nunca.
El comparador de Finbino se financia gracias a los enlaces afiliados, es decir, recibimos una comisión por parte de las entidades colaboradoras, pero eso en ningún caso encarece el precio del préstamo para ti.
Es cierto que la CAT es un buen indicador para conocer el coste de un préstamo y compararlo con otros similares, pero no es el único aspecto.
Lo que convierte a un préstamo en ideal para ti es el coste bajo, por supuesto, pero también que se adapte a tus necesidades en cuanto al importe a pedir y al plazo de devolución. Puede que busques préstamos de varios miles de euros, o un producto altamente flexible, o bien que un pequeño importe rápido sea suficiente: para cada caso encontrarás un préstamo que se ajuste.
También es buena idea comparar préstamos en función de la reputación de la entidad, de las opiniones de otros usuarios y del nivel de satisfacción o seguridad que te transmita. Todo son factores de peso.
En general, la mayoría de edad legal en Mexico es esencial (18 años cumplidos) para contratar cualquier tipo de préstamo o crédito, pero algunas entidades financieras establecen un mínimo de edad ligeramente superior, a partir de los 21 años de edad.
Al mismo tiempo, esas entidades suelen marcar un máximo de edad, que suele rondar los 70 o 75 años, a la hora de conceder préstamos, así que sólo las personas que se encuentren entre ambos límites pueden solicitar dinero. Cada entidad indica sus requisitos de edad en su página web, a las que puedes acceder a través de Finbino.
No, no es necesario. En muchos casos, cualquier tipo de actividad laboral sirve, desde contratos fijos o indefinidos hasta contratos temporales o a jornada parcial, y se pueden encontrar préstamos para autónomos.
Además, si no estás trabajando también podrás encontrar ofertas compatibles con tu situación: hay préstamos para desempleados, estudiantes y jubilados. En todos los casos, el factor que pesa es disponer de alguna clase de ingresos regulares justificables, sean del origen que sean.
Depende de la entidad y, sobre todo, depende del importe que pidas. El aval es una garantía adicional que puede ser una persona (aval solidario) o un bien (aval patrimonial) que responde por el pago en caso que el titular principal del préstamo no cumpla con su obligación de pago.
Algunas entidades piden aportar un aval para tener más opciones de concesión del préstamo, en especial cuando se solicitan importes elevados (varios miles de euros). Otros préstamos funcionan de otra forma y, por ejemplo, los préstamos por tu coche requieren aportar un vehículo para conceder el dinero, o los préstamos con garantía hipotecaria, donde lo que se aporta como garantía es un inmueble.
En general, la presencia de un aval maximiza tus opciones de que te concedan el préstamo.
Los préstamos online se solicitan sin papeleos ni documentación, excepto en casos contados. Para que la entidad financiera pueda tomar una decisión respecto a tu solicitud de dinero, necesita que rellenes un formulario con tu información personal verdadera y sin errores.
Ten en cuenta que las financieras no te conocen, así que estos datos les permiten formar un perfil crediticio para ti. Normalmente, los datos son analizados por algoritmos informáticos que toman una decisión instantánea, así que no los revisa ninguna persona. Es la alternativa moderna al banco “de toda la vida” donde ya tienen tu historial.
La responsabilidad financiera es una actitud que se centra en analizar nuestra capacidad de endeudamiento de acuerdo con los ingresos y los gastos domésticos.
Tener responsabilidad financiera implica conocer y controlar los ingresos mensuales personales o familiares, pero también especialmente los gastos y su distribución. Tener esta información permite tomar mejores decisiones financieras, como por ejemplo solicitar un préstamo, pero también aspectos relativos al ahorro o a los gastos extra (hijos, educación, viajes, celebraciones, etc.).
Ser responsable es calcular y valorar esos compromisos y capacidades para sobrellevarlos cada mes sin sorpresas desagradables ni imprevistos. Pedir un préstamo puede mejorar tu calidad de vida, pero implica adquirir una obligación de pago ineludible, así que hay que valorar el motivo, la necesidad y el momento.
Hay dos indicadores del coste de un préstamo, el Tipo de Interés Nominal (TIN) y la Costo Anual Total (CAT). El TIN indica el coste de un préstamo en intereses, mientras que la CAT es el coste total acumulado, que incluye los intereses TIN, pero también otros costes adicionales.
La CAT es el porcentaje de medida más útil a la hora de valorar el coste de un préstamo y cuando comparas entre préstamos. Te ponemos un ejemplo: un préstamo con TIN 0% podría tener una CAT superior al 0%, y por lo tanto no es necesariamente gratuito. Sin embargo, un préstamo con una CAT 0% sí es gratuito sin intereses ni costes asociados.
Como ves, la CAT es el valor de referencia para determinar el coste real de un préstamo.
Un préstamo personal es un préstamo donde la garantía es la persona que lo solicita, el titular, ya que éste responde de la obligación de la deuda con sus bienes presentes y futuros.
Los préstamos personales se pueden utilizar para cubrir la gran mayoría de gastos de consumo y necesidades habituales: