¿Te encuentras en un momento de necesidad financiera y necesitas realizar una compra inmediata? Dispones de una vivienda u otro activo que vender para pagar el préstamo, pero te va a llevar un tiempo venderlo? Entonces solicitar un préstamo puente puede ser la solución a lo que buscas.
Eso sí, como siempre que vas a solicitar financiación, asegúrate de que vas a ser capaz de hacer frente al pago de la deuda dentro del plazo acordado y que tu historial crediticio se encuentra saneado.
Definición de un préstamo puente
Un préstamo puente es aquel que se concede ante una necesidad de financiación inmediata durante un corto periodo de tiempo. Como su propio nombre indica, se trata de una financiación que se obtiene como puente para obtener un producto final deseado. Además, el prestatario solicita un préstamo puente y no cualquier otro porque será capaz de responder al pago en un futuro próximo.
¿Para qué suelen solicitarse los préstamos puente?
En general, un préstamo puente suele solicitarse por parte de un particular para comprar una segunda vivienda. Esto es, la persona en cuestión ya dispone de un inmueble que desea vender para hacer frente a la nueva compra, pero este proceso puede llevar un tiempo. Es por ello que solicita el denominado préstamo puente para financiar la segunda vivienda y cuando venda la existente devolverá el capital prestado a la entidad bancaria correspondiente.
Así, los préstamos puente se conceden bajo ciertas condiciones para garantizar la devolución de los mismos. Por ejemplo, suele establecerse un periodo de tiempo máximo de entre dos y cinco años para devolver el capital prestado más los intereses generados.
Por su parte, los préstamos puente también pueden ser solicitados por pequeñas o grandes empresas que quieran expandir su negocio, o introducir algún cambio en el mismo. Por ejemplo, imaginemos una empresa que cambia de localización a un lugar más céntrico y/o estratégico. Como dicho cambio comenzará a dar sus frutos en el medio o largo plazo, necesita inicialmente financiación para poder llevarlo a cabo. Así, un préstamo puente puede ser la solución a lo que necesita ya que en unos años lo podrá devolver gracias a la rentabilidad de su negocio.
Formas de pagar un préstamo puente
A diferencia de un préstamo hipotecario, donde se abonan el capital más los intereses generados, un préstamo puente puede pagarse de las siguientes maneras:
- Cuota con carencia de capital: en esta cuota solo se abonan los intereses generados del préstamo, sin amortizar capital, que quedará pendiente para más adelante cuando se venda el inmueble.
- Cuota especial reducida: se paga una cuota inferior a la que se pagará cuando se venda el inmueble. La mayor parte de esta devolución se destina a pagar los intereses generados del préstamo puente.
- Cuota normal: donde se amortiza el capital más los intereses.
Características y ventajas de un préstamo puente
Con todo ello, podemos resumir las ventajas de los préstamos puente de la siguiente manera:
- Se trata de préstamos a corto plazo, que vencen entre en dos y cinco años
- Permiten al prestatario obtener un fin deseado (la compra de una segunda vivienda) sin malvender a toda prisa el primer inmueble.
- Al poder escoger la forma de devolución del préstamo, es posible abonar solo los intereses generados del préstamo durante un periodo de tiempo
Desventajas de un préstamo puente
Por otro lado, los préstamos puente cuentan con las siguientes desventajas que no debemos obviar:
- La obtención de la financiación solicitada puede llevar algún tiempo, ya que la entidad prestamista necesita asegurarse de que el prestatario es solvente y será capaz de devolver el dinero prestado
- Al representar un mayor riesgo para las entidades con respecto a otros productos de préstamos al consumo, se suelen solicitar avales y garantías para conceder este tipo de préstamos
- Transcurridos los cinco años es posible que el prestatario no haya vendido su vivienda o que una empresa no haya alcanzado la rentabilidad esperada, y lo cierto es que se tiene que devolver igualmente el capital prestado más los intereses generados del préstamo puente
Consejos a la hora de solicitar un préstamo puente
Como para solicitar cualquier otro tipo de financiación, se recomienda solicitar un préstamo puente solo si estamos seguros de que seremos capaces de devolver el préstamo más los intereses generados dentro del plazo establecido.
Sobre todo en el caso de los préstamos puente, que los hemos solicitado esperando vender un inmueble o prosperar en un negocio para poder devolver el capital prestado, conviene hacerlo cuando la economía atraviesa un momento de auge y crecimiento. Como sabemos, el comportamiento del mercado es incierto y no podemos controlar lo que sucederá, pero lo que sí sabemos es que habrá más posibilidades de realizar la venta de una vivienda o de obtener rentabilidad para nuestro negocio en momentos de auge en lugar de crisis económica como las que hemos padecido a lo largo de la historia.
Alternativas a los préstamos puente
Dependiendo de la finalidad para la que se quieran utilizar los fondos solicitados, es posible que en lugar de un préstamo puente pueda solicitarse un préstamo personal que no cuente con el plazo máximo de cinco años para vender el inmueble que tenemos. Esto podría funcionar si, por ejemplo, necesitamos el dinero para dar la entrada de un piso, de un automóvil o incluso para financiar el automóvil en su totalidad.
Recordemos que existen préstamos específicos para ciertas finalidades económicas, por lo que debemos analizar bien qué tipo de préstamo nos conviene en uno y otro momento para garantizar siempre que nuestra solvencia y capacidad de ahorro son suficientes para cumplir con nuestra obligación de pago.
Fuentes: BBVA, Santander Consumer, Camino financial